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La dejé aquí un día
muchos ojos le seguían,
recorrió raudos caminos
hoy no sé su destino.
No sé si de soledades sufre
o de la mano amante
en un blog se esconde,
muchos pasaron y sus ojos le clavaron,
ya no es mía, mi hija poesía.
Querido maestro, amigo,
ayúdame a encontrarla,
la verás por ahí, algún día?
muchos ojos le seguían,
recorrió raudos caminos
hoy no sé su destino.
No sé si de soledades sufre
o de la mano amante
en un blog se esconde,
muchos pasaron y sus ojos le clavaron,
ya no es mía, mi hija poesía.
Querido maestro, amigo,
ayúdame a encontrarla,
la verás por ahí, algún día?
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