DEL QUERER AL ESTAR
Dulce secreto, tormento acidulado,
fuente de dicha y placer inexplicado,
pasión tan fuerte de amor inexplorado,
cálido sol de ardor más que deseado.
Torrente fuerza que mis venas recorre
con solo un roce de tus labios con los míos,
corazón ágil que grita y acelera,
con un ¡Te adoro! del pecho se saliera.
Y los peligros son menos que el encanto,
temores mucho más débiles que amor,
solo lo grande conlleva algún peligro,
y lo banal, nunca me interesó.
¡Amarte quiero, sin límites ni fines!,
¡Amarte quiero, sin miedo ni temor!,
¡Amarte quiero! ¡Qué tonto y qué incongruente!
¿Amarte quiero? ¡Si amándote ya estoy!
Odín Dupeyron
No hay comentarios:
Publicar un comentario